El saludo, el primer paso para el éxito.
El mexicano valora el contexto, cree en el jefe, y aprecia la relación con el mismo. Para el mexicano es importante establecer una relación positiva con su líder, donde el segundo aprenda del empleado, su familia y sus predilecciones, así mismo el empleado mexicano apreciara poder conocer un poco mejor a su jefe.
Toda buena relación en México empieza con un firme apretón de manos, se da la mano para saludar, despedirse, cerrar un negocio, agradecer por algo, controlar una situación, entre otras, y se realiza de manera constante sin importar la frecuencia y repetición, es decir se da tantas veces sea necesario.
Así mismo, tras un buen apretón de manos suele o puede seguir el abrazo, mismo que demuestra cordialidad, respeto, aprecio y es una muestra genuina de gusto al ver a alguien a quien se aprecia y respeta. El apretón de manos es universal, tanto en hombres y mujeres, pues es solemne, firme y formal, el abrazo es más informal, pero, aun se lleva al nivel de los negocios cuando las personas se respetan entre si más allá de lo profesional; en el trato personal un abrazo es importante pues denota o enfatiza el gusto que se siente al ver a la persona a la cual se le abraza. El abrazo entre un empleado y su jefe les acerca y mantiene en buena línea, pero solo deberá suceder cuando el jefe fuera del ambiente laboral lo genere.
